El jueves 21 realizamos el último concurso de cuentos del curso. Muchos de ellos hacen referencia al verano; ya se va notando que los niños tienen muchas ganas de playa y piscina. Espero que os gusten estas historias y que ellos cumplan sus expectativas en estos meses. ¡A descansar todo el mundo!
1º puesto: Raquel, "La planta que no se ha regado nunca".
2º puesto: Elena, "El verano ya llegó".
3º puesto compartido: Pablo, "El motorista fantasma"
Edurne, "La niña traviesa".
La planta que nunca se ha regado
Érase una vez una planta que muy triste estaba porque ¡nunca la habían regado! Hasta que un día, el dueño de la planta le vendió a una mujer la planta sin regar, pero como los años iban pasando y pasando, la mujer iba regando la planta y la planta ya no era una planta, era.... ¡una hermosa y preciosa flor!
Raquel
El verano ya llegó
Elena trabajaba mucho y le gustaba el cole, pero cuando llegó el calor ya estaba un poco cansada y tenía ganas de que le dieran las vacaciones. Los últimos días en clase hacían talleres divertidos, pero sentía envidia de los de infantil, que tenían talleres con payasos, pinturas y fiesta del agua, que era lo más chulo para ella y no comprendía por qué los de primaria no podían hacer su fiesta del agua. Contaba los días y las horas para terminar el curso. Llegó el 22 de junio y el verano comenzó. Feliz verano a mi seño, y a mis compis, os desea,
Elena
El motorista fantasma
Había una vez un motorista fantasma que luchaba contra unos malos: uno era de piedra, otro era de agua, otro de hielo y el último era de viento. Todos hacían el mal para quitarle los poderes al motorista, que su poder era de fuego. Le hicieron una trampa, pero como él era muy listo y los descubrió, los atrapó a los cuatro.
Pablo
La niña traviesa
En un pueblo había una niña muy traviesa que cuando se levantaba se revolcaba en la cama y saltaba. Cuando llegaba a la guardería era un terremoto y le pegaba a los demás niños y la seño le regañaba y le quitaba los chupetes. En la casa estaba dando vueltas por todos lados, hasta en su cuarto y su madre le decía:
Y desde entonces la llaman la niña traviesa.
Edurne
El vampiro chupón
Érase una vez un vampiro que entró en una casa para asustar a todos y para chuparles la sangre. Chupó la sangre a todos menos a uno.
Cristi
Los zapatos que bailaban solos
Érase una vez un niño que le gustaba bailar, y como bailaba mucho, los zapatos cobraron vida. Gracias a que los zapatos bailaban solos el niño bailaba mejor, y su seño de baile le dijo:
Y el niño le respondió que como bailaba mucho sus zapatos cobraron vida. Su seño le contestó:
Pero a su seño se le escapó el secreto y se lo contó a todo el mundo. Y todo el mundo que quiso bailar hizo lo mismo que el niño, y todos bailaron muy bien y así fueron felices.
Lucía
Jesús el aventurero
Érase una vez un niño que se llamaba llamado Jesús. Exploró la selva y encontró un lobo y se hicieron muy amigos. Se encontraron a una serpiente venenosa y a un águila y se hicieron todos amigos.
Marco
El gato poderoso
Érase una vez un gato que tenía poderes, y con sus poderes salvaba a los animales. Un día un gatito se iba a caer de un árbol muy alto y con sus poderes voló y lo salvó. El gatito hizo una fiesta para todos los animales, y llegó una gatita muy presumida y le pidió que la convirtiera en una arquera y se hicieron amigos para siempre.
Mario
Peligro en el cementerio
Una vez de Halloween en el cementerio en una tumba que se llamaba Dan era un caballero, un monstruo malvado le mató lanzándole una flecha. Cuando despertó, hace 900 años un día se enfrentó a un monstruo y lo mató. Cuando terminó le dieron por la vida.
Andrés
Los gormitis
Érase una vez unos niños llamados Nick, Toby, Lucas y Jessica que tenían que salvar a Corm. Y el malvado Magmion con sus secuaces luchaban con los señores de la naturaleza. Y un día Magmion estaba creando a Oscurion y un día lo creó. Y ya Magmion no era el jefe y los secuaces se pusieron a llorar.
Chemi
El profesor
Érase un profesor que iba al cole siempre con una bufanda amarilla y un gorro que escondía su cara, porque tenía un grano pequeño. Pero un día se lo pega a todos los niños y se pusieron llenos de granos y no fueron al cole, pero les echaron polvitos y se pusieron buenos.
Raúl
Mi perro Berni
Yo tengo un perro que se llama Berni. Es muy gracioso porque tiene el cuerpo muy largo y las patas muy cortas, ya que es un perro salchicha. Mi perro me defiende mucho y también juega conmigo y es muy cariñoso. Lo quiero mucho y es un buen perro. A mi perro le gusta esconderse debajo de la cama y de los muebles y también es muy ladrador.
Laura C.
Los niños perdidos
Había una vez, en un pueblo muy bonito, un campamento donde hacían excursiones al campo. Un día, un grupo de niños se fueron de safari y se metieron tanto en el campo que se perdieron. Gracias a uno de ellos que llevaba una brújula pudieron encontrar el camino de vuelta al pueblo, una vez allí se fueron al campamento y prometieron no irse solos más.
Anabel
La niña de cinco idiomas
Había una vez una niña que le gustaban mucho los idiomas. Un día pensó: “Voy a viajar mucho y así aprenderé a hablar muchos idiomas”. Su mamá la llevó a Francia y aprendió francés, la llevó a Inglaterra y aprendió inglés, la llevó a Alemania y aprendió alemán. Fue muy feliz hablando muchos idiomas y pensó: “Cuando sea grande viajaré más yo solita y aprenderé más idiomas todavía más”.
Marina
Las medusas
Un día de domingo una niña, un niño, su mamá y un papá fueron a la playa y los niños se metieron en el agua, de pronto se dieron cuenta de que en el agua estaba todo lleno de medusas. De repente, las mareas empezaron a cambiar y todas las medusas se fueron hacia alta mar, pero una medusa chiquitita se quedó perdida en la orilla. Triste y sola buscaba a su familia y esta familia que fue a la playa al ver lo que ocurría, cogió un cubito con agua y atrapó a la medusa chiquitita con una red y la echaron al cubito. La familia se montó en una barquita y llevó a la medusa chiquitita con toda su familia medusa. Contentas y felices todas se fueron hacia otros mares. Felices también, la familia pudo bañarse sin que los picara ninguna medusa.
Estefanía
El verano en la playa
Érase una vez que dos niños iban todos los veranos se iban a la playa y una vez su papá se llevó una barca a la playa y los niños se la llevaron al agua y se fueron al fondo del mar y sus papás llamaron a la policía y los niños se encontraron en una isla.
Antonio
El picnic poético
Un soleado día tres niñas que estaban paseando por el bosque se pararon a hacer un picnic. Primero cogieron la manta, después la cesta con la comida y por último las bebidas. Hicieron el picnic enfrente de una casa de pájaros. Se encontraron con unos amigos y las tres niñas los invitaron al picnic. Ahora una de las tres niñas contó una poesía:
“Las flores huelen, las liebres vuelan, el sol se queda y las nubes juegan”.
Nerea
El monstruo de la nevera
Érase una vez un niño que se llamaba Andrés y se fue de fiesta de pijamas y cuando a su amiga Ana se le olvidó que tenía una cosa y le dijo su amigo Andrés
¿Qué sorpresa tienes?
Pues una peli de susto.
¡Uy, qué susto!
A la hora se terminó.
Pero cuando terminó salió un monstruo de la nevera y cuando Ana y Andrés se escondieron debajo de la mesa el monstruo se puso a cantar:
“Nossa, nossa
Assim você me mata
Ai se eu te pego, ai ai se eu te pego”.
Al ver que el monstruo era bueno se hicieron amigos.
Álex.